Ray Rogers mostró su preocupación sobre las investigaciones penales que enfrenta Coca-Cola en México.

Roy Rogers fue uno de mis ídolos de la infancia. Un vaquero justiciero que montaba a su caballo Tigre, un palomino de piel dorada y crines blancas. Ahora hay un Ray Rogers, defensor de los derechos humanos con sede en Nueva York. Este personaje se presentó en la Junta Anual de Accionistas de Coca-Cola 2022, y mostró su preocupación sobre las investigaciones penales que enfrenta la multinacional refresquera en México por el presunto fraude cometido en contra del empresario mexicano José Antonio del Valle Torres por 345 millones de dólares. Cuatro años no han sido suficientes para que exista la audiencia inicial del caso. James Quincey, Presidente y Director General de The Coca-Cola Company, así cómo Jennifer Manning, secretaria corporativa del Consejo de Administración, optaron por omitir la pregunta suscrita por el defensor Rogers. Lo mismo habría sucedido en la Junta de Accionistas del año pasado cuando Ray Rogers ya increpaba a la refresquera sobre el presunto fraude y la salida de su presidenta en México, Galya Frayman Molinas quien abandonó territorio nacional en medio de dos citatorios